Editorial ECP - Viure Vallirana 83

Así es, por desgracia, cómo el Gobierno de Vallirana nos trata durante los 4 años de legislatura.

Y es que ya lo habréis notado: justo ahora queda 1 año para las elecciones. Momento estratégico. Todo está medido. Empieza el show: no es casualidad que el gobierno municipal comience a hacer todas aquellas cosas, de cara a la galería, que no han hecho el resto de legislatura.

Vemos cómo comienzan a dirigirse a los comercios, a las entidades y a la ciudadanía para preguntarles qué es lo que necesitan, mientras llevan 3 años en los que solamente se han acercado a la gente cuando se ha visto expuesta su incompetencia en redes sociales.

Nuestras calles están destrozadas, el asfalto se cae a pedazos, aceras inexistentes y toda una jungla de hierbajos que crece en todos los agujeros que se generan, pero…. veréis en muchos puntos vistosos cómo se realizan obras puntuales.

¡La política no puede ser esto! Vallirana no se merece un modelo electoralista y de postureo que piensa a corto plazo para que la política/o de turno conserve su remunerada silla en ciclos eternos.

Como oposición, vemos impotentes cómo por culpa de la mayoría absoluta, cada vez se tratan menos temas en el Pleno: temas como el nuevo contrato de basuras o la construcción de edificios públicos pasan a sesiones informativas especiales a puerta cerrada para evitar el debate. Nos hemos opuesto a un cambio de normativa en los presupuestos participativos, que pretendía quitar competencias a la comisión.

Porque debemos ir más allá de las siglas y la política tópica: creemos que cualquier gobierno debe estar fiscalizado 24 h los 365 días del año.

Por eso, es importante que no nos traten como idiotas. No aceptemos que solo se haga política el año antes de las elecciones, ni que se haga a puerta cerrada. Porque NO basta con votar cada 4 años, tenemos que presionar a nuestro gobierno local para que haga una política transparente y justa para los intereses de todos y todas.